El ícono del Real Madrid, Mesut Ozil, anunció su retiro del fútbol esta semana, con tributos que llegaron desde la capital española. Ozil fue uno de los relojes más emocionantes de Europa durante su tiempo en el Santiago Bernabéu, brindando con frecuencia más asistencias que nadie.
Todo podría haber sido tan diferente. Como un joven de 21 años que atrae el interés de toda Europa, Ozil le ha dicho a Marca que podría haber dejado el Werder Bremen por el Barcelona, no el Real Madrid.
“Esa fue una decisión entre Real Madrid y Barcelona. Y al final no era una cuestión de dinero. No sé si esto se sabe, pero yo visité Madrid y Barcelona en ese momento y la diferencia fue José Mourinho”.
El portugués hizo el esfuerzo que no hizo Pep Guardiola, que para él fue decisivo.
“Mou me hizo una visita VIP al Real Madrid. Me llevó a ver el estadio y todos los trofeos que habían ganado. Eso me puso la piel de gallina. La visita a Barcelona fue menos entusiasta y lo que más me decepcionó es que Pep Guardiola no se molestó en recibirme. Antes de ese viaje me gustaba mucho el estilo de fútbol del Barcelona y realmente me podía imaginar jugando con ellos, pero el Madrid lo dio todo”.
“Así que José Mourinho fue sin duda el factor más importante en mi decisión. Después de mis visitas, mi decisión estaba cien por cien clara: quería ser madridista”.
Así las cosas, era muy madridista y admitió que estaba llorando cuando dejó España para unirse al Arsenal. Entabló una relación cercana con Sergio Ramos durante su etapa en Madrid; pocos están más comprometidos con Los Blancos que él.
La importancia de los entrenadores para persuadir a los jugadores para que se unan se está volviendo cada vez más clara, con el impulso de reclutamiento de jugadores como Xavi Hernández como un factor importante en la estrategia de transferencia de Barcelona en los últimos tiempos. En este caso, Mourinho superó a Guardiola.
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